El Tribunal Oral Federal N°7 continuó la lectura del requerimiento de elevación a juicio del tramo “La Camarita”. La UIF señaló a Cristina Kirchner por supuestos pagos ilegales vinculados a contratos de obra pública.
En una nueva audiencia del juicio por los cuadernos de Oscar Centeno, el TOF N°7 avanzó con la lectura de la acusación presentada por la Unidad de Información Financiera, que actúa como querellante. El organismo sostuvo que la expresidenta Cristina Kirchner habría recibido 175 pagos ilegales por un total aproximado de $171 millones y US$613 mil, en el marco de un sistema de sobornos ligados a la obra pública.
Según la UIF, una empresa que mantenía vínculos comerciales con la entonces mandataria realizó por sí sola 40 entregas de dinero ilícito que superaron los $85 millones. La presentación describe un entramado sustentado en resoluciones firmadas por el exdirector de Vialidad Nelson Periotti, que habilitaban anticipos financieros del 10 al 20% del valor de las obras o montos equivalentes a certificados cuando esos pagos no se concretaban.
El esquema, según la acusación, habría tenido al exministro Julio De Vido en un rol central, con José López como coordinador del circuito y el ex titular de la Cámara Argentina de la Construcción Carlos Wagner como ejecutor. El circuito se completaría con el financista Ernesto Clarens, señalado como recaudador. La querella también imputó a Cristina Kirchner, De Vido, López y Clarens por el delito de dádivas al afirmar que hubo pagos ilegales en 175 oportunidades.





