Con la última soldadura automática, Río Negro da un paso histórico en defensa de su desarrollo y su gente. La obra, impulsada por el gobernador y financiada con el bono VMOS, permitirá exportar el petróleo neuquino por territorio rionegrino y fortalecer la soberanía energética desde la Patagonia Norte.

Con la realización de la última soldadura automática del oleoducto Vaca Muerta Sur, Río Negro alcanza un hito estratégico en su desarrollo energético y económico. La provincia, bajo el liderazgo del gobernador Alberto Weretilneck, consolida así un proyecto clave que refuerza su papel dentro del entramado productivo patagónico y nacional.

La obra, impulsada por el Gobierno rionegrino y financiada mediante el bono VMOS, representa una apuesta concreta por el crecimiento sostenido y la generación de oportunidades. Su finalización permitirá el transporte y exportación del petróleo proveniente de Vaca Muerta a través de territorio rionegrino, potenciando la integración regional y el posicionamiento de la provincia en la matriz energética del país.

Este avance marca un antes y un después para la Patagonia Norte, que se consolida como una región clave en el desarrollo de la soberanía energética argentina. El proyecto no solo impacta en la economía provincial, sino que también proyecta beneficios en infraestructura, empleo y competitividad para todo el sur del país.

Con la culminación del oleoducto, Río Negro reafirma su compromiso con una gestión que defiende sus recursos y apuesta por un futuro de crecimiento sustentable. La decisión política de avanzar en esta obra refleja una visión de Estado orientada a fortalecer la producción nacional y el desarrollo equilibrado del territorio.