Las medidas adoptadas por los últimos gobiernos afectaron directamente el trabajo del dirigente, quien criticó la paralización del servicio y el desmantelamiento ferroviario que dejaron a la región sin un medio vital para sus habitantes, además aseguró que con planificación y compromiso el tren puede volver a ser una realidad.

Uno de los casos más emblemáticos es el del tren a Bahía Blanca, que hoy permanece cerrado. Para la región, se trata de un servicio fundamental que no solo brinda una alternativa de transporte accesible a los habitantes, sino que también cumple un rol clave en la integración territorial y en el desarrollo económico local.

El dirigente cuestionó que las medidas tomadas por los últimos gobiernos provocaron un desmantelamiento progresivo del sistema ferroviario, generando perjuicios directos para las comunidades que dependen de este medio de transporte. “No es solo la pérdida de un tren, es la pérdida de oportunidades para la gente y para la economía regional”, expresó.

Finalmente, señaló que la reactivación es posible siempre que exista una verdadera planificación y un compromiso sostenido en el tiempo. En ese sentido, llamó a priorizar el transporte ferroviario dentro de una política de Estado que garantice conectividad federal, beneficios sociales y crecimiento productivo.