La diputada nacional fue elegida directamente desde la capital como candidata de La Libertad Avanza en Neuquén, priorizando el centralismo porteño por sobre los intereses de la provincia y respondiendo a los intereses políticos de sus líderes nacionales.

Nadia Márquez es la diputada nacional que fue designada como candidata a senadora por La Libertad Avanza en Neuquén, en un proceso que sus críticos califican como decidido directamente desde Buenos Aires. Su postulación refleja, según quienes cuestionan la medida, una estrategia de centralismo porteño que prioriza los intereses del liderazgo nacional por sobre las necesidades locales de la provincia.

La elección de Márquez ha generado debate sobre la autonomía de Neuquén en la definición de sus representantes, ya que su candidatura se percibe como un mecanismo para garantizar la alineación con las decisiones y prioridades de la dirigencia de La Libertad Avanza a nivel nacional. Esto pone en evidencia la tensión entre las demandas provinciales y los intereses políticos de los líderes centrales.

En este contexto, la figura de Márquez simboliza, para sus críticos, la influencia del poder central sobre las provincias, cuestionando la capacidad de Neuquén para elegir candidatos que reflejen fielmente la voz y los intereses de sus ciudadanos. Su postulación se interpreta como parte de una estrategia más amplia de control político desde la capital, que limita la independencia de la representación local en el Senado.